Si realmente quieres que tus espacios hablen de ti, no encontrarás una forma más efectiva de decorarlos. Gracias a los vinilos decorativos que reproducen textos y mensajes tus paredes se convierten en un soporte en el que expresarte, en toda una plataforma desde la que comunicar.
Elegir la tipografía y el color
- Además del texto que reproduzca el vinilo, que es lo más importante, también resulta decisivo a la hora de decorar el tamaño que tenga el vinilo, la tipografía y el color de las letras y los dibujos.
- En lo que se refiere a la tipografía esta es la encargada de definir el estilo, y ha de ir acorde al tipo de texto. Una letra simple, rectilínea y sin florituras nos evoca ambientes minimalistas, sobrios y sencillos, mientras que una letra clásica con trazos curvilíneos y flexibles, resulta mucho más romántica y sentimental. ¿No te parece?
- En cuanto al color, para elegirlo hemos de tener en cuenta varios factores, desde el tipo de texto, el lugar en el que lo vamos a instalar y la gama cromática del resto de elementos que componen la decoración. Así, para un salón van bien los tonos neutros y el blanco y negro, mientras que en el cuarto de los niños lo mejor es apostar por un efecto multicolor con tonos intensos.
- En la cocina podemos jugar con los colores de los muebles y el resto de los elementos. Tienen cabida tonos más vivos como el rojo o el verde intenso.


Vinilos para los dormitorios
- Son los espacios más íntimos de nuestra casa, aquellos a los que no todo el mundo tiene acceso. Por eso se convierten en el espacio perfecto para colocar un bonito vinilo.
- Quedarán perfectos si los pones en la pared de la cama, para que hagan las veces de cabecero. Puedes elegir mensajes románticos o divertidos, con frases que te guste leer nada más despertarte. Elige colores que contrasten sobre la pared, en armonía con los tonos del mobiliario o la ropa de cama.
- Los vinilos también triunfan en el cuarto de los niños, tanto para bebé como para niños más mayores.
